Había que llegar temprano. Eso costo un poco que se entendiera y siendo un jueves fue incluso un desafio para algunos que llegaran de frentón en teñida de oficina. La noche fría y el barrio tranquilo contrastaban con la calidez y vivacidad del interior del Teatro Caupolican. Los ánimos se preparaban para la que prometía ser la fiesta del año, dado los nombres que se daban cita en tan movida velada: Midnight Juggernaugts, The Twelves y 2 Many Dj's, era lo lógico que podía suceder.
Al entrar, el hormiguero humano, bastante multicultural por lo demás (de donde habrá salido tanto gringo??) era ambientado por Julián García Reyes en persona con mezclas bastante a la altura de la situación que sirvió de buena entibiada para lo que se venía.
Lo que se venía era nada menos que un menú completo compuesto solo por platos fuertes. El escenario preparado con lo justo y necesario anunciaba la entrada de Midnight Juggernauts que sin mucho aparataje llegaron e hicieron lo suyo. Ya que sus temas brillan por calidad y no por cantidad, como era de esperarse, tocaron sólo una hora y no las casi dos horas según un dudoso programa que circulaba por ahí. Sólo el show de MJ ya hacía valer la inversión. Comenzando por Shadows y rematado por In to the Galaxy tocaron ininterrumpida, armónica y potentemente su corto pero conciso repertorio. Curiosamente, el baterista en vez ser el típico tímido enterrado detrás de su instrumento, destacaba con su pelo revuelto y su chaqueta de director de orquesta, que por lo demás hacía buen juego con sus baquetas y su enajenada interpretación. Cabe destacar la solides interpretativa de la banda y su capacidad de prender y a su envolver a su audiencia, incluso a través de detalles no menores como esos recurrentes coros ascendentes que le dan ese toque ciencia ficción a su música, recurso utilizado por diversas bandas con buenas intenciones pero que a la hora de los que hubo no logran estar a la altura de la situación.
Absolutamente transportados a otro planeta esperamos la entrada de 2 Many Djs (que en realidad son 3 integrantes; 2 humanos y un laptop) seguido por The Twelves. Ambos grupos mantuvieron la vara alta y los (imposibles recordarlos a todos) hits no dejaban de patear la pista; editados, mezclados, juxtapuestos, reinterpretados, aglutinados, amarrados entre sí, abducidos y fagocitados los unos con los otros… orgía que se repitió hasta las 3:15 de la mañana pero que en ningún momento soltó las riendas de lo que es mantener una pista bien prendida.
Phoenix, Pnau, Cut Copy, Of Montreal, The Knife, Justice, New Order, MGMT, the Clash, Daft Punk, the Gossip, Chemical Brothers y Siouxsie son algunos ejemplos de lo que destacó en tal ensalada musical. The Twelves impactó insertando algunos clásicos y sorpresas inesperadas, tales como Bee gees (ojo que era la novena de Beethoven reinterpretada por Bee gees en versión disco y reinterpretada para la ocasión), The Beatles o volones personales tales como Sepultura (había que estar ahí para verlo). Y para finalizar, nada más ni nada menos que un bello y electrónico Love will tear us apart.
Las visuales sí que fueron un aporte y no un accesorio dispensable. Desde las imágenes texturadas con MJ, pasando por el estilo juegos de Atari de 2Many Djs (personalmente me gustó mucho el Pac - man) y rematando con las innovadoras visuales de The Twelves, extrañas pero divertidísimas con esos personajes y sus peculiares anti-movimientos quienes muchos pasaditos de copas deben haber pensado que eran una broma de sus ojos.
A las 3:30 continuaba la fiesta. Ya se habían ido los extranjeros del escenario y sólo quedaban los gringos del público mezclados con la fauna local. Yo en cambio, formaba parte de aquellos que tenían q guardar ánimos para ir a trabajar al otro día. Lo único que me queda claro es que el evento estuvo a la altura de las expectativas, ¿Qué si fue la fiesta del año? Aún queda bastante año así que eso está por verse. Mientras buscaba mis cosas en custodia sólo cabía pensar que definitivamente no fue “otro tranquilo Jueves”.
por Matika
