sábado, septiembre 27, 2008

Suede: Tan Suave and Elegant

Brett Anderson debe ser una de las pocas personas que puede decir en esta vida: "Hice lo que quise y simplemente me aburrí. Un hombre que de verdad es un emblema del orgullo británico. El primero en dar voz a la inquieta juventud inglesa de principio de los 90`s que pedía a gritos ser representado por alguno de los suyos, no por bandas gringas con mensajes como "Me da lo mismo la vida, todo apesta". Eso y algo mas fue el aporte que realizo el ex líder de bandas tan esenciales de la música británica como Suave and Elegant y Suede. Eso y algo mas.

A dos días de celebrar un nuevo cumpleaños de este personaje de los 90, me siento con la capacidad y el orgullo de dar un completo punto de vista de la importancia, influencia y calidad que este tipo lleva aportando durante casi 20 años a la música comtemporanea.

Empezemos por el principio, el fenómeno Suede. Uno de los puntos rescatables de esta gran banda fue el acierto con el que se manifestaron, la responsabilidad que se hecharon a los hombros y lo bien que cumplieron las expectativas. El, el líder de una banda que partió su carrera como Suave and Elegant y contaba en su formación original con músicos como Bernard Butler y Justine Fishmann (Que después inicio su camino paralelo como Elastica).

Sin lograr mucho éxito al principio mas que un par de presentaciones por los lugares under de ese momento, la historia comienza a cambiar con las fuertes declaraciones a las que Brett acostumbro a la amarillista prensa británica, siempre ansiosa de escándalos y fuertes declaraciones. Fue así como a principios de los 90 no era raro ver a este particular personaje desafiando a la decadente escena grunge norteamericana con frases como "Yankees Go Home" en prestigiosas revistas como Select, Melody Maker y el naciente Nme. En un momento, Brett Anderson se supero con sus propias palabras y eso solo lo hacia un bocaza mas. Había llegado el momento de mostrar lo alardeado con hechos.

Y así se comienza a escribir la historia de Suede, que parte con Suede. Un disco homónimo amado, realmente amado por los hambrientos jóvenes de esa época. Una placa que sin ser genial deja en claro que no estamos frente a la ultima moda inglesa ni mucho menos frente a un grupo de individuos que no saben que hacer con lo que tiene. Un disco de momentos realmente elevados, con himnos para una juventud que aun esperaba a las estrellas, que después serian Oasis (En esa época aun conocidos como The Rain), Pulp (Que teniendo algo así de 5 discos, no causaban emoción en los medios de comunicación) y los noveles Blur (Que aun desvariaban entre Seymur y un montón de nombres que tenia pensada su disquera). Ellos, por un tiempo fueron amos y señores de la escena inglesa. Jóvenes y jóvenes adultos veían en Bernard Butler un nuevo héroe en la guitarra, después de la separación de The Smiths y la perdida del trabajo del admirado Jhonny Mars, o un Ziggy Stardust moderno como lo era Brett Anderson, un tipo que jugaba con la ambiguedad a su antojo y hacia y deshacía en el escenario. Sobre estos dos pilares y una selección envidiables de singles (Animal Nitrate, The Drowners, Metal Mickey la solida So Young), además de ser un disco simplemente completo con momentos de desenfreno como Moving y momentos de introspección como She`s Not Dead, fue una solida base para ser considerados como la nueva sensacional del movimiento británico. El 1er paso estaba dado.

Singularmente y como pocas veces se ha dado en la historia de la música, el segundo paso en gran parte se le debe a las bandas rivales. Ya a esas alturas, con bandas como Pulp que lograban sobresalir un poco mas (El llamado efecto He´s in Hers), con Blur sorprendiendo con su disco debut y con unos Oasis ya liderados por Noel Gallagher, algo paso que Suede fue el gran ganador. Definitivamente con el éxito subieron los egos y algunos integrantes de estas bandas se pusieron bocazas. Fue así como Graham Coxon, el niño prodigio de Blur en declaraciones para Nme dijo " Bernard Butler se sentaba horas ante mi puerta rogandome que lo dejara ser mi roudie" o un Damon Albarn pavoneando las marcas de moda en las portadas de Melody Maker, hicieron que Suede como grupo se sintiera herido. La prensa ya había hecho lo propio subiendo a Blur a las nubes y envalentonandolos a un primer asalto al continente americano. Y lo pagaron caro. Un tour que no alcanzo a ser completado, siendo victimas del desprecio americano y volviendo en la total quiebra y derrotados como nadie, se dieron cuenta que la peor batalla la habian perdido en su propio pais. Un ajuventud que se sintio traicionada y cambiada, los esperaba foribundos.

Algo que se pago demasiado caro fue descuidar su natal Inglaterra. Incipientes bandas como Supergrass empezaban a recibir elogios y nuestros chicos Suede eran los amos y señores. El punto culmine quedo demostrado en la grabacion del 1er concierto de Suede, algo intimo, emocional y androgeno como lo es "Love and Poison", registro en vivo que la banda grabo para recordar como finalizaron su gira de promocion de su homonimo "Suede". La batalla habia empezado y nuestros chicos tenian la de ganar.

por S.Banks

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